viernes, 31 de agosto de 2007

Viajes

Vengo de una familia muy viajera. Del lado de mi papá, toda su familia solía salir de casa frecuentemente, aunque fuera sólo de día de campo. La familia de mi mamá, por otro lado, se desarrolló de cierto modo como una tribu nómada, que fue dejando a lo largo del país su legado conforme tenían que mudarse debido al trabajo de mi abuelo. Como era una familia numerosa, en cada sitio quedaba algún miembro de la familia casado; ahora tengo tíos y primos regados por todo el país :)

Cuando mis papás se conocieron, mi papá tenía planes de estudiar una maestría en Francia. De modo que se casaron y se fueron a vivir allá. Aprovechando su estadía del otro lado del océano, viajaron por gran parte de Europa y Asia occidental. Yo nací en París al año de su arribo a Europa, y fui protagonista de muchos de sus viajes, aunque no recuerde ninguno por la corta edad que tenía. A mis dos años "volvimos" a México y he vivido en Guadalajara hasta hoy.

Desde entonces, en cada ocasión que se presenta nos damos una escapada aquí y allá. A mis papás les encanta el turismo nacional, y cuando tenemos la oportunidad, viajamos a sitios bonitos de nuestro hermoso país. Conocemos Oaxaca, Veracruz, Guerrero, Puebla, Michoacán, el Estado de México, el DF, Querétaro, Guanajuato, San Luis Potosí, Zacatecas, Colima, Jalisco, Nayarit, Sonora, Sinaloa, Nuevo León y Chihuahua.

Los estados que me gustaría conocer pronto son Chiapas, Tamaulipas y las Bajas Californias.

¿Y cómo viajamos? Mis papás se certificaron recientemente como Guías de Turistas oficiales de la Secretaría de Turismo. Esto quiere decir que de manera oficial pueden ofrecer sus servicios a personas que quieran visitar algún lugar de méxico. Realmente es sólo a mi papá a quien de vez en cuando le "caen chambitas" de grupos de personas que quieren un tour de Guadalajara o sus alrededores. También ha organizado unos cuantos paseos a otros estados. Gracias a esto, está muy actualizado y ha aprendido muchos tips que posteriormente disfrutamos los tres (así ya sabemos a qué hotel llegar, qué punto importante visitar y en qué otros sitios no vale la pena entretenerse).

La gran mayoría de las ocasiones viajamos manejando. Son pocas las veces en que tomamos camión y muchas menos avión. Esto se debe principalmente a que nos gusta "paladear" el trayecto, visitar los pueblos y ciudades que quedan en el camino, disfrutar el paisaje, tomarnos nuestro tiempo pero sobre todo, cargar con todos nuestros tiliches. Afortunadamente tenemos la Van, una camioneta Ford Econoline del '84 que compró usada mi papá hace unos años y que ha resultado ser una maravilla. ¿Por qué? Porque se adapta a nuestro ritmo de vida y tiene espacio suficiente para transportar todo lo que la familia Curiel-López necesita. Miren:

En la Van cargamos desde herramienta hasta una mesa plegable, pasando obviamente por nuestras maletas, agua, etc.

Es tan espaciosa... es nuestra casa a media carretera.

Encontrar lugar para estacionarla es algo difícil, pero... ¿qué haríamos sin ella?

Además se maneja bien agustamente.

Una estación bastante segura donde quiera que vayamos, que nos ha permitido compartir muchas experiencias con nuestros seres queridos.

La verdad sí somos bien tilichentos, pero así nos gusta. Mi siguiente misión es sacar la relación de las salidas más importantes que hemos hecho y "trakearlas" en Google Earth tanto temporal como espacialmente.

Hasta ahora los viajes que más grabados se me han quedado son los que hicimos a Puebla, Oaxaca, Veracruz y San Luis Potosí. Y eso que para los tres primeros no contábamos todavía con la Van: ¡los hicimos a bordo del vocho! Por increíble que parezca, nos aventamos la ida y vuelta a Oaxaca en el vochito, que desde entonces comenzó a presentar problemas relacionados con la computadora y la alarma. En fin, todo por servir se acaba...

No hay comentarios.: